Songtexte: Miranda. Enamorada.
Al momento de ser realista nunca me considere una especialista
Y sin embargo algo en mi cambio se exactamente como sucedio
Mi corazon palpitaba cada vez que ese hombre se me acercaba
Y con el tiempo me empezo a gustar debo decir que no me fue tan mal
Como de repente todo se ha ordenado desde que ha llegado mi vida cambio
Ya no soy la misma que tu conociste entonces ahora estoy mucho mejor!
Porque me di cuenta que tuvo sentido haber recorrido lo que recorri
Si al final de cuentas el era mi recompensa que suerte que nunca me fui
Yo nunca fui muy afortunada mis anteriores novios no me cuidaban
Me maltrataban y ma hacian llorar y nadie me venia a consolar
Ahora estoy como loca pensando que voy a comerle la boca
Quiero besarlo hasta sentir dolor y someterlo al mas hermoso amor
Como de repente todo se ha ordenado desde que ha llegado mi vida cambio
Ya no soy la misma que tu conociste entonces ahora estoy mucho mejor!
Porque me di cuenta que tuvo sentido haber recorrido lo que recorri
Si al final de cuentas el era mi recompensa que suerte que nunca me fui
Y sin embargo algo en mi cambio se exactamente como sucedio
Mi corazon palpitaba cada vez que ese hombre se me acercaba
Y con el tiempo me empezo a gustar debo decir que no me fue tan mal
Como de repente todo se ha ordenado desde que ha llegado mi vida cambio
Ya no soy la misma que tu conociste entonces ahora estoy mucho mejor!
Porque me di cuenta que tuvo sentido haber recorrido lo que recorri
Si al final de cuentas el era mi recompensa que suerte que nunca me fui
Yo nunca fui muy afortunada mis anteriores novios no me cuidaban
Me maltrataban y ma hacian llorar y nadie me venia a consolar
Ahora estoy como loca pensando que voy a comerle la boca
Quiero besarlo hasta sentir dolor y someterlo al mas hermoso amor
Como de repente todo se ha ordenado desde que ha llegado mi vida cambio
Ya no soy la misma que tu conociste entonces ahora estoy mucho mejor!
Porque me di cuenta que tuvo sentido haber recorrido lo que recorri
Si al final de cuentas el era mi recompensa que suerte que nunca me fui